1773
El Papa Clemente XIV firma un documento suprimiendo la Compañía de Jesús. Por disposición del mismo Papa, las Congregaciones se volvieron una asociación más de la Iglesia universal. Durante el siglo dieciocho crecieron considerablemente las congregaciones, de 2500 a 80.000. La consecuencia fue una disminución en el fervor y en la práctica. La vida espiritual de los miembros y su atención social hacia los marginados de la sociedad quedaron reducidos a prácticas piadosas y acontecimientos anuales y simbólicos. La Congregación Mariana se volvió un movimiento piadoso de masas, distinto de lo que Ignacio o Jean Leunis habían pretendido.